Opinión personal:
Empecemos conociendo que el libro se publicó en 1890... Esta historia me gusta por lo maravillosamente bien que está escrita, me fascinó la manera de escribir de este autor porque lo hace realmente fácil, los diálogos son tal como si lo estuvieras viviendo. Además de que contiene un sentido filosófico sobre muchos temas interesantes y que pasan como banales en nuestra vida diaria, principalmente la belleza, y que realmente existe una importancia en ésta, claro que subjetivamente.

En cuanto a los personajes, tenemos a Basilio (el pintor) que a mi parecer es la parte buena y el único con ideas cuerdas en la historia; Henry, el sujeto con las ideas más raras que me había encontrado y que me han hecho reflexionar sobre muchos aspectos de la vida, aun así difiero en gran parte con su estilo de pensar y de vivir, les recuerdo que el libro es de hace tantos años que obviamente muchas maneras de pensar han cambiado, a él le encanta la vida, es un hombre con convicción pero orientado a los pecados que la vida ofrece, para mí es el más destacable dentro de la historia. Y finalmente tenemos a Dorian, nuestro protagonista, empezó siendo una imagen de pura inocencia que se dejó manchar por las ideas de Henry, esto lo llevó a vender su alma con tal de nunca perder su belleza, y es ahí donde la parte interesante comienza.

En conclusión, la trama de la historia es buena, un clásico con gran parte filosófica que estoy seguro te hará pensar sobre tus propias ideas, es uno de esos libros que, te agrade o no esta historia, te harán reflexionar sobre la vida, vale la pena leerlo.

Ahora tiene usted un rostro maravillosamente bello, señor Gray. No frunza usted el entrecejo. Lo tiene. Y la belleza es una de las formas del genio; más alta, en verdad, que el genio, puesto que no necesita explicación [...] ¿Sonríe usted? ¡Ah! Cuando la haya perdido no sonreirá...